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Digitalización y sustentabilidad, oportunidades del comercio mundial.

Ingeniero en electrónica y con gran experiencia en áreas tecnológicas, Daniel Scarafia es vice presidente de Hitachi Vantara para Latinoamérica y Caribe.

Hace diez años, su camino laboral en la empresa empezó con una posición en Argentina y después de exitosos proyectos en Sudamérica, en el 2021 tomó la responsabilidad de Latinoamérica, un reto lleno de oportunidades.

“Inicié con la responsabilidad de Latinoamérica durante la pandemia de COVID-19 pero ya empezaba la nueva normalidad. La gran oportunidad en ese momento tuvo que ver con lo que la pandemia trajo para nuestra industria. El confinamiento, el trabajo remoto y todo lo que vivimos durante el año 2020 fue el principal impulsor de la gran transformación digital”, comenta a The CEO Magazine.

“El mercado brinda las condiciones para poder crecer, y creo que las necesidades de los clientes también lo hacen”.

Scarafia platica que durante muchos años se habló en el mercado sobre la transformación digital y la importancia de que las compañías empezaran a trabajar en el mundo de los datos y los beneficios que esto traería a sus negocios; pero el cambio no era fácil para todos.

“No todas las compañías tenían presupuesto; no todas estaban convencidas. La pandemia fue el mayor promotor de esto, lo que llevó a que las empresas de cualquier sector tuvieran que empezar a analizar la transformación digital”, señala.

La emergencia sanitaria generó que el desarrollo de cualquier industria tomara de la mano a la tecnología.

“Cuando hablo de crecimiento no es sólo en facturación, también estamos creciendo en relevancia en el mercado, en relevancia para nuestros clientes”.

“Ahí es donde vi la gran oportunidad para Hitachi Vantara; nuestra compañía se enfoca en la información digital y los datos. Todo el proceso de los datos digitales siempre ha sido parte de nuestro core business. Veo una oportunidad enorme de mercado para nuestro principal portafolio”, señala.

A nivel personal también hubo oportunidades al tomar mayor responsabilidad llegando a nuevos mercados y los nuevos cambios del comercio mundial.

“A nivel personal, la gran oportunidad fue que después de haber estado 10 años administrando una región, pude llevar esa experiencia a los mercados más importantes de Latinoamérica como Brasil y México; mercados más grandes, con problemáticas mucho más complejas. En estos dos años he aprendido mucho de nuestro negocio, de nuestra industria. Honestamente creo que lo estamos haciendo bien y lo estoy disfrutando mucho”, señala.

La empresa tiene una visión de descarbonización para sus centros de datos, lo que forma parte de la nueva transformación digital.

“Una de nuestras verticales más importantes como holding a nivel global es el tema energético, y cuando hablas de sustentabilidad, Grupo Hitachi es pionero en esto. La sustentabilidad es tratar de llegar al punto de ser carbono neutral y es uno de nuestros principales objetivos. Muchos clientes ya están tomando la sustentabilidad como un punto de decisión para sus compras”, comparte.

“Mi mayor aprendizaje ha sido adaptar nuestra estrategia y adaptar hasta mi pensamiento país por país”.

La compañía ha sabido sortear el escenario económico adverso. De acuerdo con datos de Daniel Scarafia, en el 2021 logró aumentar la operación en Latinoamérica un 50 por ciento, por encima de los valores pre pandemia.

“En el 2022 volvimos a crecer 10 por ciento respecto al 2021. En cuanto a los planes de crecimiento, estoy estructurando los equipos en los distintos países para tratar de sostener este crecimiento de doble dígito en los próximos tres o cinco años. Creo que el mercado brinda las condiciones para poder crecer, y creo que las necesidades de los clientes también lo hacen”, señala.

El objetivo de Scarafia es mantener el alto nivel de relevancia en el mercado y seguir creciendo en la región de la mano de estrategias sustentables. El reto no es fácil ante el actual escenario internacional y diversos movimientos político-económicos.

“El mayor reto global es la crisis que ha retrasado algunas inversiones; las compañías se han enfocado en proyectos que sean exclusivamente necesarios para mantener las operaciones. La primera complejidad que tiene Latinoamérica es que a pesar de que somos una región, tenemos varias subregiones; eso hace mucho más complejo el tema de la realidad político-económica. Lo primero que uno tiene que conocer son las características de cada uno de los países y la forma de hacer negocios”, comenta.

“Tratamos de respetar las culturas, eso es muy importante a la hora de hacer negocios”.

Para lograr un mayor crecimiento y posicionamiento en un mercado con constantes cambios y un contexto social, político y económico bajo incertidumbre, es importante planificar, contar con una estrategia y adaptarla país por país.

“Trato de hacer una planificación de dos a tres años teniendo en cuenta estas condiciones y tratando de reforzar en aquellos lugares donde sabemos que el año va a tener mayor actividad o movimiento. Reforzando actividades comerciales en diferentes regiones. Mi mayor aprendizaje ha sido adaptar nuestra estrategia, y adaptando hasta mi pensamiento país por país”, concluye.

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