El sector bancario no siempre enfrenta escenarios positivos, especialmente cuando las tasas de interés se mantienen altas en todo el mundo y persiste la amenaza de recesión.
Los dueños de negocios y aquellos con hipotecas observan a lo lejos las enormes ganancias de los grandes bancos internacionales.
“Ayudamos a los ahorradores locales a obtener el mejor interés para su dinero”.
Existe una excelente alternativa: el banco comunitario, basado en la comunidad y de propiedad local.
Este tipo de banco se centra en relaciones más personales y cercanas con sus clientes, así como en asegurar que parte de sus ganancias regresen a la comunidad; en lugar de una sucursal que pertenezca a una organización multinacional, estos bancos son negocios independientes y benefician a sus localidades.
Los bancos comunitarios suelen ser menos conocidos que los bancos globales e internacionales por su menor número de operaciones. Sin embargo, eso podría cambiar tras el lanzamiento de El Banco de Dave, una película que ha cautivado a los espectadores, y trata sobre la biografía del banquero Dave Fishwick.
Fishwick tiene varios negocios exitosos, pero es Burnley Savings and Loans, el banco comunitario que estableció en la ciudad de Burnley, por el cual es más conocido.
A pesar de la resistencia de un sistema bancario británico arraigado, un banco comunitario en el noroeste de Inglaterra ahora ofrece una alternativa viable a los bancos tradicionales.
“Ayudamos a los ahorradores locales a obtener el mejor interés en su dinero; luego, ese dinero lo prestamos a personas que no pueden solicitar créditos a los bancos tradicionales, simplemente porque ya no están interesados en prestar a ‘personas reales’”, explica Fishwick a The CEO Magazine.
“Siempre trabaja con personas que admires. Rodéate de buenas personas y sucederán cosas buenas”.
“Yo aplico la misma dinámica en cada empresa que he iniciado. Siempre trabaja con personas que admires. Rodéate de buenas personas y sucederán cosas buenas”, señala.
Fishwick reconoce que hay cierta desconfianza en el sector bancario, pero considera que a través de un enfoque en el servicio y trato al cliente, los bancos comunitarios pueden ganar la lealtad de sus clientes y sus comunidades.
“Las habilidades de comunicación son más importantes que cualquier otra calificación”, indica.
Hacer equipo con su colega David Hadfield fue la base del banco de Fishwick desde un inicio. Hadfield, un gerente de banco con experiencia de varias décadas en el sector, aporta su conocimiento bancario, mientras que Fishwick, con su experiencia en el lanzamiento y operación de varios negocios, aplica las lecciones aprendidas.
“Las habilidades de comunicación son más importantes que cualquier otra calificación”.
“David es un gerente de banco a la antigua. Comenzó como empleado a los 16 años y ascendió como gerente de banco; conocía a todos sus clientes, sabía dónde trabajaban y dónde vivían. Realmente los entendía. Él ha enseñado a mi equipo a cómo ayudar a las personas. Juntos hemos construido un equipo”, dice Fishwick.
Como cualquier negocio que amenaza con alterar el status quo, este sistema centrado en la comunidad se ha enfrentado a cierta resistencia por parte de los bancos más grandes. Pero en el Reino Unido Fishwick ha ganado apoyo de la política federal y considera la regulación política como esencial.
“En 2008 el sistema bancario colapsó, y este año ocurrió de nuevo. Necesitamos políticos que nos ayuden a encontrar un camino sensato para salir adelante”, comparte.
Con las actuales presiones sobre el costo de vida, el apoyo político es necesario. Fishwick ha visto cómo el aumento de los precios de los alimentos y energía afecta a sus clientes.
“Lo que necesitamos ahora son bancos comunitarios, dirigidos por la gente, para beneficiar a la gente”.
“Cada vez más gente viene a pedir préstamos pequeños, incluso han venido personas a solicitar un préstamo para comprar fórmula para bebés. Las tasas de interés se mantienen altas, y nadie tiene el ingreso extra para pagar el doble de su hipoteca cada mes”, dice.
La solución es clara para Fishwick, especialmente frente a lo que ha observado durante sus recientes viajes internacionales promocionando la película sobre su vida y el banco: las comunidades necesitan recuperar el poder, la capacidad de decisión sobre su dinero y asegurar que las ganancias regresen a las comunidades que las generan.
“Lo que necesitamos ahora son bancos comunitarios, dirigidos por la gente, para beneficiar a la gente”, concluye Fishwick.