Kuala Lumpur, cuna de las emblemáticas Torres Petronas, y del mejor pan del mundo, el roti canai, es una metrópoli en rápido crecimiento con mucho que ofrecer al viajero exigente. Desde fabulosos bares en azoteas, a centros comerciales de categoría mundial pasando por restaurantes con estrellas Michelin. Te decimos cómo pasar un fin de semana de lujo en la cosmopolita capital de Malasia.

Dónde hospedarse

Cuando se trata de opulencia, es difícil superar al The Ritz-Carlton, Kuala Lumpur. Este hotel de cinco estrellas, situado en el elegante barrio del Triángulo de Oro, ofrece algunas de las habitaciones y suites más grandes y mejor equipadas de la ciudad, pero a nosotros nos gustan más las Club Suites. Además de ser súper elegantes, el servicio de mayordomo 24 horas y el acceso al Club Lounge, la estancia incluye sesiones de estilismo VIP personalizadas en Balmain y Tom Ford, en el vecino centro comercial de lujo The Starhill.

Disfruta de un té por la tarde en el sofisticado Lobby Lounge o reserva un comedor privado en Li Yen. Este galardonado restaurante chino ofrece auténtica cocina Chiu Chow maridada con tés chinos de primera calidad y vinos de arroz chinos de 30 años de antigüedad.

Retírate a las exclusivas cápsulas de privación sensorial de Else y desconéctate del mundo.

Para una experiencia más boutique, pero no menos lujosa, visita Else. Este elegante hotel está situado en el palpitante corazón de Chinatown, en un elegante edificio reformado de los años treinta. Empieza el día desayunando en el ecléctico y chic Raw Kitchen Hall, un comedor asiático-latino abierto todo el día, que por la noche se convierte en una sensual coctelería. Imprescindible el shakshuka con salchicha de cordero.

¿Buscas un respiro de la frenética energía de la ciudad? Sumérgete en el capullo de las exclusivas cápsulas de privación sensorial de Else y desconéctate del mundo. Todas las habitaciones están diseñadas como santuarios privados con cuartos de baño revestidos de mármol, pero la Suite Else es especialmente digna de mención. Con 84 metros cuadrados, es la suite más grande del hotel y ofrece a los huéspedes un balcón privado con vistas panorámicas de la ciudad.

Dónde cenar

Malasia es famosa por su deliciosa comida callejera, pero el sol del mediodía puede ser implacable en los trópicos. Así que lo mejor es explorar los pasar malams (mercados nocturnos), como el cercano Petaling Street Market.

Una opción es ir a Sunway City para almorzar en el Gordon Ramsay Bar & Grill. Además del clásico solomillo Wellington del famoso chef, te recomendamos el soufflé Arnold Bennett horneado dos veces: un clásico del Savoy Grill. Si buscas algo más informal, Street Pizza -otro concepto de Gordon Ramsay- abrió en septiembre a la vuelta de la esquina.

Hay mucho que descubrir en el menú innovador del chef Darren Teoh con platos complejos y emocionantes, como las albóndigas de lengua de pato con ubi kemili.

No olvides reservar mesa en Dewakan, el restaurante de alta cocina con estrella Michelin que defiende los ingredientes autóctonos de Malasia. Hay mucho que descubrir en el menú vanguardista del chef Darren Teoh con platos complejos y emocionantes, como las albóndigas de lengua de pato con ubi kemili.

El progresista restaurante del sur de la India Nadodi, justo al otro lado del parque del hotel Four Seasons, es igualmente digno de mención. Considerado el sucesor espiritual de Gaggan, sus menús degustación fusionan sabores tradicionales con técnicas contemporáneas.

Ir por un coctel

Después de cenar, diríjete al galardonado Bar Trigona, también en el Four Seasons. Elegido mejor bar de Malasia durante cuatro años consecutivos, este sofisticado local se enorgullece de incorporar productos malayos de origen local. Prueba el refrescante Limón Ais, que lleva la miel Trigona que da nombre al bar, junto con tequila Espolón y menta de finca.

Dadas las infames condiciones del tráfico en Kuala Lumpur, es mejor ir de bar en bar en Chinatown, donde la densidad de bares de primera categoría hace que sea más fácil -y divertido- recorrerlo todo a pie. Empieza por el Small Shifting Space, un bar de vinos naturales y platos para compartir diseñado con travertino plateado y ladrillo expuesto como telón de fondo.

El impresionante paisaje urbano desde el balcón abierto y las bebidas de inspiración japonesa hacen que el recorrido valga la pena.

A continuación, diríjete a PS150: un clandestino y resplandeciente bar disfrazado por fuera de juguetería retro. Sigue con un tranquilo paseo turístico hasta Shhhbuuuleee, un bar en la azotea del centro cultural REXKL.

Llegar hasta allí no es fácil (hay que atravesar una inmensa librería laberíntica), pero el impresionante paisaje urbano desde el balcón abierto y las deliciosas bebidas de inspiración japonesa hacen que el recorrido valga la pena.

Qué visitar

En una ciudad tan densa, la emoción nunca está lejos. REXKL, antiguo cine histórico, es un espacio para eventos muy popular entre la comunidad creativa local. Acoge exposiciones de arte, conciertos de música electrónica, catas de vino y mucho más. Hazte amigo de los asistentes habituales de este lugar, ellos te enseñarán las mejores fiestas de la ciudad.

Encontrarás una botica natural, una panadería de inspiración francesa Tommy Le Baker, galerías de arte, estudios de diseño y una librería.

Los amantes de la música clásica pueden ver a la Orquesta Filarmónica de Malasia en el Dewan Filharmonik Petronas, la primera sala de música clásica de Malasia.

También hay muchas oportunidades para ir de compras en la ciudad, desde centros comerciales de alta gama como Pavilion Kuala Lumpur y Suria KLCC hasta proyectos de rejuvenecimiento urbano dirigidos por artistas como The Zhongshan Building. Aquí encontrarás una botica natural, la boulangerie (panadería) de inspiración francesa Tommy Le Baker, galerías de arte, estudios de diseño y una librería independiente.

Si te apetece ver la abarrotada capital desde las alturas, ¿por qué no reservar una excursión privada en helicóptero que te lleve hasta las cuevas de Batu? Surcar los cielos es una forma asombrosa de contemplar la ciudad desde una perspectiva única.

Este artículo se publicó por primera vez en Quintessentially y se publica con su autorización. Para más información, visita Quintessentially.com